El ritual del afeitado puede llegar a ser placentero y desastroso a partes iguales. Ya sea por una mala técnica de afeitado, un día malo en el que no prestamos la suficiente atención o una mala elección de productos, si no lo hacemos bien podemos acabar con nuestra casa irritada, con una barba poco precisa y con algún que otro pequeño corte.
Cuando se trata del cuidado facial en hombres, y en específico del arte del afeitado, existen multitud de productos en el mercado para este fin: cremas, lociones, espumas, cuchillas, brochas, navajas…
En el post de hoy nos dedicaremos a hablar de uno de estos artículos en específico: las navajas de afeitar. Una alternativa a las clásicas cuchillas que si se utiliza correctamente, puede llegar a dar unos resultados asombrosamente precisos y efectivos.
Tipos de navajas de afeitar
Si eres un neófito en este mundillo de las navajas de afeitar, seguramente no tendrás ni idea de por dónde empezar a escoger el modelo ideal para ti.
De hecho, en el mercado existen multitud de tipos de navajas de afeitado que se adaptan a distintas necesidades. Nosotros nos centraremos en las diferencias por tipo de filo. Estas son las principales:
- Punta recta: el contorno de la punta de este tipo de navajas desciende en línea recta, de forma perpendicular al filo y termina en una punta muy afilada la cual resulta muy útil para delinear la barba y afeitar zonas pequeñas de la cara. Sin duda, es una de las que nos proporcionan más precisión, aunque deberemos tener un poco de experiencia para poder conseguir resultados buenos.
- Punta redondeada: estas son las más recomendadas para empezar si no hemos utilizado nunca una navaja de afeitado. Son más seguras y evitarán que nos hagamos cortes innecesarios ya que tienen la punta redondeada.
- Punta francesa: las navajas de afeitar con punta francesa son perfectas para delinear, pero más seguras que las de punta recta. Aunque no nos proporcionan una precisión tan apurada.
- Punta española: en este caso, estaríamos hablando de una punta francesa curvada hacia dentro. Requiere de destreza para su utilización ya que sin experiencia, resulta relativamente fácil cortarse accidentalmente. Desde el punto de vista estético, las navajas de punta española suelen ser de las más deseadas entre los coleccionistas.
Nuestra selección
Ventajas de utilizar una navaja en el afeitado clásico:
Sabemos que las cuchillas de afeitar suelen ser la opción predilecta de afeitado; principalmente por su practicidad y rapidez en su utilización. ¿Pero sabías que una navaja de afeitar bien utilizada puede proporcionarnos resultados mucho mejores?
Estas son las ventajas de las navajas de afeitar por delante de las cuchillas:
- El resultado es mejor: con una buena y depurada técnica, seremos capaces de conseguir unos mejores resultados de afeitado ya que la navaja rasura el vello desde su salida a ras de piel. La superficie facial quedará más suave y agradable al tacto
- Más económicas a largo plazo: al no tener que estar reponiendo constantemente las cuchillas, nuestro bolsillo también nos lo agradecerá.
- Son más ecológicas: una navaja de afeitar reduce la cantidad de residuos que generamos en comparación con las cuchillas, y en especial con las cuchillas desechables. A pesar de que ya existen maquinillas con cuchillas intercambiables que sustituyen a las desechables, lo cierto es que siguen siendo una opción poco ecológica. Las navajas de afeitado, siempre bien afiladas y conservadas, pueden durar años e incluso, décadas.
- No tiene por qué ser un proceso más lento: aunque muchos lo crean así, el afeitado con navaja no tiene porque ser más lento que con cuchilla. De hecho, una vez te habitúes a su utilización y perfecciones tu método, el afeitado será coser y cantar.
- Ideal para personas con piel sensible: el afeitado clásico con navaja es más respetuoso con la piel, con lo que si tienes cierta sensibilidad, esta puede ser una buena alternativa a las cuchillas.
¿Qué navaja es mejor para conseguir un buen afeitado?
Como ya te estarás imaginando, no existe una respuesta universal a esta pregunta, pues las diferencias entre las distintas navajas que existen en el mercado responden a la necesidades dispares de los consumidores.
Sin embargo, existen varias pautas generales que puedes tener en cuenta para escoger tu navaja de afeitado ideal:
- Si eres novato: te recomendamos encarecidamente que empieces con una navaja de punta redonda. Reducirás las posibilidades de cortarte y te permitirá coger soltura con esta herramienta. Tal y como te hemos contado, no son las más precisas del mercado, pero sí las más seguras.
- Si te arreglas la barba y necesitas un acabado preciso: en este caso, las mejores navajas de afeitado son las de punta recta, ya que resultan mucho más precisas para conseguir acabados precisos. Si todavía no cuentas con la destreza suficiente como para atreverte con este tipo tan avanzado, te aconsejamos que te decantes por una de punta francesa.
- Si te afeitas totalmente la barba: si rasuras completamente tu vello facial, con una navaja redondeada deberías tener más que suficiente.
Consejos para conseguir un mejor resultado con navajas de afeitar
En la actualidad, parece que las cuchillas de afeitar han desplazado casi totalmente las clásicas navajas. No obstante, utilizar el afeitado con navaja no solo es una forma de recuperar una tradición de siglos, sino que además, nos permite obtener resultados mucho mejores, además de optar por una opción más respetuosa con el medioambiente.
Para conseguir estos buenos resultados debes seguir algunas recomendaciones importantes:
- Limpia tu piel antes del afeitado: preferiblemente con agua y jabón neutro sin detergentes, o con algún producto de limpieza especializado. Esto evitará posibles irritaciones durante el afeitado. Y procura usar una buena brocha de afeitar (puedes ver nuestros consejos aquí)
- Mantén tu navaja de afeitar siempre afilada: este punto resulta imprescindible no solo para conseguir un buen acabado, sino también para evitar ejercer más fuerza de la necesaria con la hoja y acabar irritando la piel de sobremanera.
- Técnica depurada: deberás sujetar la navaja de afeitado con tu mano dominante mientras que con la otra, tendrás que tensar la piel para rasurar de forma efectiva.
- Segunda pasada: para asegurarte de que tu afeitado es el esperado, la segunda pasada es imprescindible para repasar todas aquellas partes que han podido quedar inacabadas. ¡Ten cuidado de no irritar la piel ejerciendo más presión de la debida!
Conservar correctamente la navaja de afeitar: si la cuidas, una navaja de afeitar de calidad puede durarte muchos años. De hecho, ¡muchas pasan de padres a hijos! Después de usarla, asegúrate de limpiarla con agua y secarla concienzudamente antes de guardarla para evitar su oxidación.
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